El cartero siempre llama dos veces

XVI

Levanta la mirada a la luz del día,
hacia la luna clara, la de belleza rara,
deja que su conjuro ruede por tu cara,
se invocan los astros y la mitología.

Tras el encanto mágico de tu sonrisa,
se va la luz en este ocaso breve,
el sol que torna su fulgor en leve
mientras comienza a aparecer la brisa.

Saldremos a cenar no hagas ninguna cena,
que te invito conmigo a la orilla del mar,
está estrellado y encima hay luna llena,
haremos el amor por que nos gusta amar.

Iremos donde la brisa se ventila,
con un beso fugaz cual remolino,
ahí donde se cruza nuestro destino
la forma de tu silueta se perfila.

Te quiero porque puedo ser yo misma,
sin broncas, sin absurdas pretensiones,
con estas mis calladas expresiones,
de amor, que sé que a veces te lastima.

Jamás estoy triste mientras que me quieras,
mientras que en mi cuerpo reine la esperanza,
mientras que hacía ti, incline la balanza,
no habrá más inviernos, sólo primaveras.

De tu erotismo yo me siento una esclava,
rozan los labios libando de parte a parte,
mi boca te quema, mi lengua te lava,
con habilidad casi... sin rozarte.

Itziar - Gominola. Domingo 27 de junio de 2010.

Soy la flor que derrama su perfume
y al ocaso del sol tiende a cerrarse,
si tú no estás, parece marchitarse,
la frialdad de mi cama me consume.

Siento el alma sedienta de ternura,
y mi cuerpo está de deseo ansioso,
mi sed de ti nunca encuentra el reposo
y vivo entre la calma y la locura.

Eres la ola que besa mi arena,
y que se lleva mis sueños prendidos,
aunque huyes como los peces heridos,
que luchan contra redes y cadenas.

Un desierto de arenas movedizas,
donde yo paseo tu amor ausente,
sé que algunas veces me muestro hiriente,
cada verso sin ti, mi alma agoniza.

Yo, soy de ti, el mejor de los deseos,
lo mejor de ese vino que te encanta,
en invierno más cálida que una manta,
de tu cuerpo la locura y el mareo.

Entre jadeos se oyen  voces confusas,
el llanto de un niño, los rezos a un muerto,
del alma se escapan  ansias difusas
te lleno de besos con sed del desierto.

No me rendiré si en mi navegar no hay espacio,
resistiré tu embestida, aunque muera luchando,
contigo es más rojo este amanecer porque te amo,
despacio, porque si no es así moriré amando.

Itziar - Gominola. Domingo 4 de julio de 2010.

Tu eres un huracán yo la meseta,
te excito despertando tus sentidos,
mi abrazo es como siempre retorcido,
aunque tu me penetras cada grieta.

Aunque en amores quiero ser discreta,
me pierdo, entre el suspiro y el gemido
que con el viento te llega en un silbido
y entre tu vientre suave se conecta.

Tan diferentes, tan complementarios,
que se lamen, se ensamblan, se conectan,
en el amor somos tan necesarios,

Todos los recelos se desconectan
me derrito ante ti, como manteca,
besos en cascada como rosarios.

Itziar - Gominola. Domingo 4 de julio de 2010.

Mareas como un vino que envenena,
calienta como llama tu suspiro,
me estrujas y en tus garras no respiro,
mientras que acaricias mi melena...

Versos acumulados son tus manos,
crótalos, que las hacen más hermosas,
son puertos como alas de mariposa,
que llegan a mis rincones más lejanos.

Mientras las gotas de tu dulce miel,
por mis senos ruedan ganando terreno,
yo, me revuelvo fiera por tu cieno
descubriendo asombrada tu ardiente piel.

De tus dulces versos mata el veneno,
mil veces me muero con tu penetrar,
abrasas mi cuerpo en tan hondo infierno,
que mi cuerpo frío, logras abrasar.

Mis ojos en los tuyos que me sueñan,
inventando mil nuevas fantasías,
mientras tú sueñas, yo hago poesías
y en cada verso me hago tu dueña.

Itziar - Gominola. Sábado 24 de julio de 2010.

 Te hago revivir mil aventuras,
te apasionan mis versos matinales,
mis besos son caricias siderales,
locuras impregnadas de ternuras.

Tu cuerpo que me ofrece su dulzura,
te delatan esos ayes guturales,
que en el campo amoroso son avales,
aunque a veces tu hambre me tortura.

Me vuelvo de tu magia torbellino,
atleta sin costarme esfuerzo alguno,
mi libido con arte te maneja...

Cuando lento llegas a tu destino,
yo me abro en el momento oportuno,
y al cielo nos empuja y empareja.

Itziar - Gominola. Domingo, 25 de julio de 2010.

Te daría mi vida si pudiera mirarte,
como miran la luna, las curiosas estrellas,
 tu lengua por mi piel va dejando sus huellas,
en el rincón más hondo donde puedas colarte.

Mirarte a los ojos es vivir tu historia,
escucharte hablar con tu dulce acento,
me hace revelar al mundo lo que siento
desvelar que te amo de forma notoria.

Pero muchas veces es bastante duro,
eso de ver tu cuerpo cuando flota,
el mio anda con la quilla rota,
pues se quiso entregar pero no pudo.

Creo que siempre eres feliz a mi vera,
eres llama que obnubila mi conciencia,
me derrito cuando noto tu presencia,
y conviertes mi otoño en la primavera.

Tus manos se enredan como injertos,
y recorren mi cuerpo con usura,
buscas y llegas a mí con premura,
a mis valles y rincones más desiertos.

Tú puedes decirme que siga adelante.
yo prolongo astutamente el primer beso.
me acurruco contra tu pecho en exceso
jugando mi mano te encuentra expectante.

Itziar - Gominola. Sábado, 31 de julio de 2010.

Te miro y te encuentro algo inquieto,
como ansiando llegar a aquella estrella
y poder entregarle tu alma bella,
o es que quieres escribir un soneto.

Mas inspirarte en la luna es un reto,
tras la nube encontrarla y dar con ella,
yo en tu piel, voy dejando alguna huella,
de un poema raquítico boceto.

Cuando te lo leo bajas la vista,
cierras los ojos como resignado,
noto como un rubor en tus mejillas,

Provocando te doy alguna pista,
para ti, mi poeta enamorado,
el placer te lo ofrezco de rodillas.

Itziar - Gominola. Domingo 1 de agosto de 2010.

Te quiero porque tienes la ternura,
sin importarte riquezas ni atavismos,
presumes de prudencia y de cordura,
no gustas de falaces espejismos.

Se abren las flores al sol naciente,
brillarán con sus rayos hasta la noche
hasta que llegue la luna en un derroche,
tan voluptuosa y amorosamente.

Estoy feliz pues estudio en tu mirada,
desde donde me enseñas a ver tu vida.
contemplas la mía, me ves encendida,
prendida, caliente y arrebatada.

Te quiero cuando te vas, cuando regresas,
cuando me buscas amor... cuando me ignoras,
la pasión te la brindo a todas horas,
tú, gimes y suspiras cuando me besas.

Mi cuerpo se retuerce deseoso,
me domina ese fuego abrasador,
no importa que mi cuerpo esté ansioso,
si es tu piel lo que reclama en su temblor.

Itziar - Gominola. Viernes 6 de agosto de 2010.

Uso mi lengua como arma perfecta,
haces que me rinda como sierva a tus pies...
no con palabras, o besos fugaces,
sino con mi boca hambrienta de placer.

Reconocen mis labios tus rincones,
venas, latidos, lo que hay por descubrir;
sacas de mis pechos mil sensaciones
y te vuelves lluvia cayendo sobre mí.

Dame tu savia mientras bebes la mía,
se pierde tu boca en mi oscuro rincón,
Monte de Venus que atrapa el deseo,

Un volcán lascivo que entra en erupción;
termina la noche va llegando el día,
llenos de cansancio, sudor... satisfacción.

Itziar - Gominola. Domingo 15 de agosto de 2010.